Todo concluye al fin

Con lágrimas interminables y un profundo dolor doy por terminada esta etapa bloguera. Mi vida dio un giro drástico. Para simplificar y no entrar en detalles, en mucho menos de lo que una persona tarda en darse cuenta, se terminó mi matrimonio, mi aventura de viajes y locura pero por sobretodo, mi gran historia de amor. Pero ese amor me regaló a la maravilla más hermosa del mundo: una hija. Ghalia nació el 8 de mayo de 2012 luego de muchas dificultades. Es sana y perfecta. Si vos (sabés a quien me refiero, si vos) alguna vez lees esto: TE AMO CON TODA MI ALMA. SIEMPRE LO HARE. Gracias a todo aquel que haya pasado por aquí. Hasta siempre. Nati

Chau Valencia, hola Europa profunda

Se terminó la etapa valenciana. Nos recibió fría e invernal y nos despide a puro naranjo en flor y sol mediterráneo.

Ahora toca volver al frío, al escenario de tanta historia nefasta: Polonia. Con mucha ilusión (y algo de resignación) dejamos España y nos embarcamos en otra nueva aventura (y van...) con rumbo norte.

Obeid trabajará en el famoso astillero donde nació el movimiento Solidaridad en la ciudad de Gdansk (Danzig). Investigaremos mas in-situ y transmitiré mas detalles.

Tuvimos visitas familiares, paellas, paseos, lecturas, trasnochadas de insomnio, muchas incertidumbres y un cansancio final (pero bien conocido) de hacer cajas, valijas, trámites y traslados.

No puedo dejar de mencionar mi tristeza ya que a esta entrada le faltará mi fiel seguidora: Elsi. Te voy a extrañar.

Reportare desde allí entonces. Hasta la próxima!

Deshielo en puerta

Llego la primavera al hemisferio norte. Fue un invierno largo, doloroso y cuesta arriba. Muchas cosas e incontables kilómetros recorridos.
Un enero para el olvido, un febrero repartido entre Túnez, Buenos Aires y mami en Bilbao.

El 1 de marzo nos encontró en Barcelona y días después nos colapso con una inesperada nevada histórica. Nos fuimos esa misma tarde a Valencia, en donde todavía estamos pero probablemente por poquito tiempo mas. Vivimos las fallas, probamos paellas. Vemos los almendros, naranjos, cerezos y demás arboles que ya están en flor. Un verdadero espectáculo.

Se avecinan nuevos destinos y con ellos mas mudanzas, aventuras y lugares por descubrir.

Para los curiosos, hay imagenes de los últimos meses en: http://picasaweb.google.com/schvartz

Hasta la próxima!

Not Dead Yet

No, no. Muerto no, abandonado si.

El blog esta hibernando. Do Not Disturb. Utiliza este tiempo para crecer, descansar y, entre penunmbras, pensar un poco.

Afuera de la cueva, la vida sigue su curso. Imparable, sin esclarecimiento témporo espacial, pero insistente y real.

Pronto llegara el deshielo.

Estamos.

Panzalización

Hablamos de globalización?

He aqui un claro reflejo cotidiano de la multiculturalidad predominante en mi estilo de vida.
Y por supuesto, la alimentación no se iba a quedar atrás....

Click en la imagen para ver en detalle

Todos a bordo!

Parece que todos los domingos a la tarde-noche (aqui se hace noche cerrada a las 17.30 hs) en el barco de Obeid se hacen “asados” pero como acá los domingos son martes (se trabaja de sábado a jueves) no se sentía domingo porque es un dia laboral comun.
Para llegar al Mercator que esta en altamar, tuvimos que ir en un remolcador ( una embarcación pequeña y con mucha potencia utilizada para ayudar a la maniobra de otras embarcaciones, principalmente al empujar a dichos barcos en muelles pero tambien en mar abierto). Para embarcar al remolcador tuvimos que ir hasta el jetty (especie de muelle en un páramo en el medio de la nada, solo arena y algunos tractores). Luego de un corto y bastante movidito rayecto de 20 minutos aprox llegamos a la mole, la gran draga. Oxidada y cansada, pero supongo que contenta con nuestra visita. Claro, para subir hay que hacerlo por una escalerita nada firme (a estribor si no me equivoco - de costadito), hay que ser valiente y no mirar para abajo.
Una vez arriba, los vikingos y los filipinos nos recibieron con toda clase de animales a la parrilla. Fue entretenido. Había unos cuantos ahogando sus penas en el karaoke (y en el constante flujo de cerveza, claro)
No estuvimos mucho tiempo porque el próximo remolcador que nos llevaria de nuevo a la tierra firme iba a venir muy tarde. Bajar fue otra proeza.

Linda noche calurosa y de luna llena en alta mar!

Acá estábamos esperando al remolcador

Nótese los zapatos (suecos) que tranquilamente usa Olaf el vikingo...

Karaoke filipino/belga (u holandes). Que dupla.

Oh, man...Omán

La imagen se aprecia borrosa por la terrible cantidad de niebla y humedad que predomina en la zona al atardecer

De verdad todavía no tengo mucho para contar. Llegamos y nos quedamos en un hotel horrible al lado del aeropuerto. Por la ventana se veía arena y aviones. No podía salir. Fue feo.
Ahora nos mudamos a un lugar muy lindo, con vista al mar, living y cocinita. Como esta justo atrás del Grand Hyatt, puedo hacer uso de las instalaciones.
Solo estuvimos unos días pero la primera oportunidad nos fuimos a conocer la playa de Qantab. El camino, no muy largo, entre las montañas era increíble. Al llegar vimos un mar tan azul que no podíamos creerlo. Tomamos un barquito que nos llevo a una calita desierta. Y allí pasamos la tarde, entre sanguchitos y caracoles de mar.
El resto del tiempo nos lo pasamos perdiéndonos en la ruta, conociendo supermercados y comiendo hummus.
Iré contando más. Por ahora, unas instantáneas.